Puntuable sobre todo por los puntos incontables

Descripción: Terrorífica, depresiva y puntuable.

Acuérdate de mis puntos de esos en los que caen siempre que llueve luna o sale agua.

Eres tan incoherente como la vida misma me decía aquella estrella que no sentía nada. El regalar estrellas... ¿vino de una serie de comedia? ... Mira que no había cosas mas cutres que regalar como esa flor de plástico que nunca llego, carta que no fue escrita o collar arrojado al vacío supongo.

Ahora frena y explícame que se gana o que se pierde porque mi cara sigue diciendo lo mismo de siempre y me gustaría poder saber el que de todas las rachas esas horribles, si es que incluso a veces me pesa la vida como me pesan tres putos libros.

Y... me autocritico por no soltar verdaderas gilipolleces (que también).

Y vuelves y me llamas sin que lo oiga y sin cogerlo cuelgas,

te sientes esquivo a besos fermentados de la mejor boca que probaras en años,

 y bueno no todo es cálido como sexo en sofás,

 ni tan perfecto como pinta renosaurio.

¿Y encuentras a soledad mientras destruyes humanidad o como va?

¡¡¡¡GRITAME JODER!!!! 

Demuéstrame que por rabia se muere,

y se mata por amor,

pero no me llenes de más mierda.

(-Señorita por favor que basta es usted.

-Pues te jodes y sigues mirando como brillan las teclas o como contestas rápidamente un mensaje que no tiene ni sentido.)

Parece ser un juego de palabras como el ''The name game''

¿Sabes? ya no hace falta que grites,

todo se acabo en 2014.

Game Over chipi.

Martes suena bonito,

tanto como tu cara en pleno otoño,

o como mis bragas por tus dedos, 

haciendo la espera mas impaciente que pueda haber en la vida.

No te doy las gracias al igual que no dejo que me las des pero te digo que me haces mas amenos los días estos de infierno y risas,

muchas risas por tener una cara que no vibra por nada

ni derrocha cosas inertes pero si rencor.

Vuelvo a esperar verte tras el cristal todas las noches,

perdida entre colillas y humo oloroso.

Vuelvo a quererte como cada primavera mientras,

 parpadea la luz de mi escritorio.

Vuelvo a acertar en predecir que las cosas cambian,

que ya no somos los de antes, 

ni nos echamos de menos como antes,

me odias a muerte mientras te guardo un rencor infinito.

Pero ya no vuelvo a volver a decir vuelvo quererte,

infierno dolor por tus malas jugadas,

pequeñas mentiras por tu cara sin nada,

punto y final a capitulo sin final.